la mirada que cruzaron durante un segundo es el episodio de la pasión que ha consumido más ángeles en su llamarada es la comunicación más secreta que el otro mundo haya hecho a éste es la teología de la historia en estado de trasparencia es la santidad del sufrimiento que se miró al espejo y se encontró igual es el amor a primera vista más doloroso que haya experimentado Dios es el segundo que ha durado más siglos de transfixión es la mirada más completa que Dios ha lanzado al mundo que Dios ha dejado al mundo como reliquia la más completa de sus propios ojos y que la santa madre Iglesia guarda casi intacta en su corazón.
José Miguel Ibáñez Langlois,El libro de la Pasión, VI. El Vía Crucis, 3
El misterio cristiano siempre es dramático. Cuando un padre confía a sus hijos una misión, los hijos pueden abusar de esta confianza y de esta generosidad que reciben. El amor no es pues aquello que impide el drama. Si no amo a nadie, no soy vulnerable. Si no amo nada ni a nadie, puedo vivir con objetos muertos y no con personas libres que puedan traicionarme.
Muchas veces pensamos que “el amor es una solución”. Pero la Biblia pone de manifiesto que el amor es una aventura. Y esta historia de amor, que es la historia de Dios con los hombres, es la historia de la posibilidad de numerosas traiciones.